El jefe de Utah, Spencer Cox, firmó el tesina de ley HB 230 el pasado 25 de marzo, promulgándolo oficialmente como ley, un paso que posiciona al estado como un nuevo actor en la prohijamiento de bitcoin y las criptomonedas en Estados Unidos.
Ese mismo día, Cox asimismo dio luz verde a otros 199 proyectos aprobados por la Sesión de Utah durante la sesión genérico de 2025, según informó la oficina del jefe en su comunicado oficial.
El HB 230, conocido como “Blockchain and Digital Innovation Amendments”, entrará en vigor el próximo 7 de mayo, estableciendo un ámbito regulatorio que investigación fomentar el uso de bitcoin y su tecnología en los sectores conocido y privado del estado.
El tesina, inicialmente presentado delante la Sesión de Utah, proponía la creación de una reserva estratégica de bitcoin, una medida que generó atención por su potencial impacto financiero y simbólico.
Sin secuestro, esa disposición fue eliminada tras modificaciones aprobadas el 7 de marzo, cuando el Senado de Utah votó 19-7-3 a valimiento de una interpretación ajustada del textocomo reportó CriptoNoticias.
La idea llamativo apuntaba a que el estado acumulara bitcoin como parte de una táctica financiera, pero los tecnicismos y debates legislativos derivaron en su restricción. Ahora, la ley se centra en entregar la prohijamiento de criptomonedas y tecnologías de redes descentralizadas, eliminando barreras regulatorias para empresas y ciudadanos interesados en estos activos digitales.
Con esta estatuto, Utah investigación incentivar la innovación en el ámbito de las criptomonedas, protegiendo adicionalmente a la industria de la minería de Bitcoin, un sector que la ley reconoce por su relevancia económica y tecnológica.
Asimismo, la norma permite a las empresas trabajar con decano claridad reglamentario, promoviendo el uso de bitcoin en transacciones y su integración en servicios estatales, siempre que se cumplan ciertas condiciones.
Aunque la marcha de una reserva estratégica reduce el talento simbólico que Utah podría favor tenido en el movimiento de prohijamiento oficial de criptomonedas, el ámbito regulatorio sigue siendo un avance significativo para el ecosistema digital en el estado.
Para que Utah pueda contar con una reserva estratégica de bitcoin en el futuro, será necesario que los legisladores presenten un nuevo tesina de ley que contemple explícitamente esta posibilidad. Dicho tesina debería aventajar el proceso constituyente, incluyendo la aprobación del Senado, y asaltar los obstáculos que llevaron a la exterminio de esta disposición en el HB 230.
Bitcoin, un cambio de percepción de los gobiernos estadales
Con la promulgación del HB 230, Utah se convierte en el segundo estado de Estados Unidos en aprobar una ley vinculada con bitcoin, siguiendo los pasos de Kentucky. En ese estado, el jefe Andy Beshear firmó el tesina HB 701, transformándolo en ley y estableciendo un precedente en la regulación de criptomonedas.
Como informó CriptoNoticias, la estatuto de Kentucky asegura el derecho a la autocustodia de activos digitales, permitiendo a los ciudadanos tramitar sus criptomonedas sin intermediarios. Por otra parte, autoriza el uso de estos activos en pagos sin imponer impuestos adicionales y protege las operaciones de minería de Bitcoin frente a regulaciones discriminatorias.
Ambas leyes, la de Utah y la de Kentuckyreflejan un cambio en la percepción de las criptomonedas en el ámbito estadalpasando de ser un tema insignificante a uno que requiere atención legislativa.
En Utah, la exterminio de barreras regulatorias abre la puerta a que empresas tecnológicas y financieras exploren nuevas oportunidades, mientras que la protección a la minería de Bitcoin replica a la importancia de esta actividad en la infraestructura de la red. La minería, por ejemplo, ha sido objeto de debate en otros estados por su consumo energético, pero Utah opta por respaldarla como un motor financiero.
El enfoque de Utah contrasta con el de Kentucky en algunos aspectos, ya que este postrer pone un acento manifiesto en la autocustodia, un derecho que no se detalla de guisa tan prominente en el HB 230.
Sin secuestro, los dos estados comparten el objetivo de crear un entorno oportuno para las criptomonedas, alejándose de posturas restrictivas que predominan en otras jurisdicciones. Esta tendencia podría alentar a más estados a considerar legislaciones similares, especialmente en un contexto donde bitcoin deseo acogida como activo financiero y útil tecnológica.
La firma del HB 230 por parte del jefe Cox marca un hito en la historia legislativa de Utah, alineando al estado con la innovación digital en un momento en que las criptomonedas generan entusiasmo. Aunque la ley no incluye la reserva estratégica originalmente propuesta, su enfoque en la prohijamiento y la protección de la industria de las criptomonedas sienta las bases para un crecimiento sostenido del sector en el estado.