La capitalización de las criptomonedas estables o stablecoins supera los 230.000 millones de dólares, sin previsión de caída a corto plazo. Históricamente, esta métrica ha servido como narración para identificar las etapas del mercado de los activos digitales, y en esta oportunidad no hay excepción.
En 2022, la capitalización alcanzó un techo de 187.000 millones de dólares en abril, encajado ayer de que comenzara el mercado bajista de bitcoin y las criptomonedasque se prolongó por poco más de dos primaveras.
Ahora, en pleno 2025, los datos sugieren un panorama diferente: el mercado estaría a fracción de camino en su carrera alcista, con señales positivas en el horizonte.
Según IntoTheBlock, la capitalización de las stablecoins, para el viernes 14 de marzo, rondaba los 219.000 millones de dólares y sigue creciendo; CoinMarketCap, con un documento más nuevo para hoy sábado 15 de marzo, la sitúa en 233.000 millones de dólares, manteniendo una tendencia al elevación.
Este incremento apunta a que el ciclo alcista podría estar en su período intermediadejando aún reconvención por delante en el esperado Bull Run de bitcoin y los criptoactivos.
Hay que recapacitar que las stablecoins funcionan como puente entre las finanzas tradicionales y los activos digitales, facilitando transacciones en exchanges, aportando solvencia y ofreciendo refugio frente a la volatilidadlo que las hace preferidas por comerciantes e instituciones en mercados turbulentos.
Más allá de su utilidad, la proposición de stablecoins refleja el sentimiento del mercado: un aumento señala longevo demanda de exposición a criptomonedascuando el haber entra al ecosistema, mientras que una disminución sugiere inquina al peligro y posibles retrocesos.
En este momento, el crecimiento constante de la capitalización de las criptomonedas estables respalda la idea de un mercado en expansión, liderado en longevo parte por USDT, la stablecoin de Tether Limited, cuya capitalización superó recientemente los 143.000 millones de dólares. Esto es un movimiento que, como reportó CriptoNoticias esta semana, históricamente ha coincidido con alzas en el precio de bitcoin.
Julio Bronceado, director de investigación de CryptoQuant, lo explica: “La capitalización de USDT se correlaciona positivamente con el precio de BTC; su celeridad indica longevo solvencia o entrada de haber fresco al mercado”.
En este contexto, bitcoin muestra señales favorables, tras la caída de precio de la semana pasada cuando estuvo entrando en zona de sobreventa, lo que implica que la presión de saldo sobre la demanda alcanzó niveles que suelen preceder una reversión en el precio de BTC, una situación positiva para el activo digital de longevo valencia.
En 2022, el pico de las stablecoins marcó el fin de un ciclo, con una caída tras los 187.000 millones de dólares que dio paso al mercado bajista; hoy, el panorama cambia con los 233.000 millones de dólares de capitalización, mostrando un crecimiento sostenido, sin indicios de un techo inmediato.
Analistas interpretan esto como una pista de que el bull run aún tiene fuerza, situando al ciclo alcista en su fracción, según los datos, con las stablecoins, especialmente USDT, sosteniendo esta novelística.
El rol de las criptomonedas estables trasciende la utilidad destreza, actuando como termómetro del mercado, donde su expansión refleja confianza y flujo de habermientras su encogimiento ha anticipado recesiones en el pasado.
Ahora, el aumento de la capitalización y expulsión de USDT y el repunte normal de la capitalización del mercado de las stablecoins, apuntan a un proscenio animoso. El bull run, esperado por inversionistas, tiene camino por recorrer, respaldado por la solvencia que aportan las stablecoinsmientras el mercado de criptomonedas, liderado por BTC, mantiene el impulso, con todo y correcciones.
