Tal como estaba pautado, este 27 de marzo se realizó la audiencia en el Comité Bancario del Senado de Estados Unidos para ratificar la nominación de Paul Atkins como presidente de la Comisión de Bolsa y Títulos de Estados Unidos (SEC).
Encima de Paul Atkins, asistieron a la sesión presidida por el senador republicano Tim Scott varios de los nominados por el presidente Donald Trump para establecerse cargos importantes en su estancia.
Entre ellos estaban Jonathan Gould, para ser Contralor de la Moneda; Luke Pettit para ser Subsecretario del Riquezas; y Marcus Molinaro, para ser Administrador Federal de Tránsito en el Unidad de Transporte.
El nominado a la SEC contestó a las preguntas de los senadores, asegurando que dará una dirección diferente para la agencia en materia de criptomonedas. Esto, con el fin de marcar un cambio respecto a lo que venía haciendo el organismo en los últimos cuatro abriles, bajo la trámite de Gary Gensler.
«Una de las principales prioridades de mi presidencia será trabajar con mis colegas comisionados y el Congreso para proporcionar una almohadilla regulatoria sólida para los activos digitales mediante un enfoque racional, coherente y basado en principios», dijo Atkins.
Adecuado a su experiencia como comisionado republicano de la SEC bajo la presidencia de George W. Bush, Atkins fue blanco de preguntas relacionadas con la entorchado de la SEC en los últimos abriles.
Varios senadores republicanos aprovecharon para cuchichear de lo que calificaron como el «desastre de Gary Gensler» bajo la empresa de Joe Biden. Se refirieron con ello a las medidas tomadas por el expresidente de la SEC, simpatizante en lo que se ha definido como una arremetida regulatoria en contra de empresas de criptomonedas.
«Sólo tienes que ser capaz de respirar y no ser un completo chiflado furioso para ser el mejor comisionado de la SEC en comparación con el posterior tipo», expresó el senador Bernie Tostado.
Atkins respondió afirmando que enfocará su trabajo en que los inversionistas tengan una regulación efectivoproponiéndose «sacar la política de los mercados». Su objetivo es eliminar la incertidumbre en el sector de las criptomonedas.
En este punto, el senador Scott comentó que si Paul Atkins es ratificado “devolverá a la agencia a su labor principal: avalar que nuestros mercados de capitales sigan siendo la envidia del mundo”.
Hasta ese momento, el ataque de la mayoría de los miembros del Comité se dirigió a la trámite preparatorio de la SEC. Las críticas cerca de Atkins vinieron a posteriori, con la décimo de la demócrata Elizabeth Warren.
La senadora reiteró sus dudas sobre la capacidad de Atkins para ser imparcial con el sector de activos digitales, en el que se ha desempeñado como asesor de varias empresas. Insistió en que sus vínculos con las criptomonedas son “impresionantes”.
«Sus lazos financieros con las industrias que pronto regulará plantean serias preocupaciones sobre su capacidad para evitar conflictos de intereses como regulador y plantea interrogantes sobre su enfoque en la regulación de las criptomonedas», acotó.
Bota ya había manifestado estos cuestionamientos en una carta que envió al nominado el pasado 23 de marzo, lo cual fue reportado por CriptoNoticias.
En un modismo inusual para este tipo de audiencias, al final se supo que no se haría la votación que se esperaba al suspensión de la sesión para confirmar o no las nominaciones. El futuro paso en el proceso de confirmación es que el Comité defina la momento para aceptar a extremidad este paso. Luego, enviará los resultados para su posible aprobación por parte del Senado en pleno.
