El Salvador y Estados Unidos aceleran su relaciΓ³n comercial con un nuevo entorno de acuerdo recΓproca que impulsa el comercio digital y traerΓ‘ beneficios para la industria de bitcoin (BTC). El pacto, anunciado por la Casa Blanca el 13 de noviembre de 2025, elimina barreras y sienta un precedente secreto para futuros acuerdos en torno a los activos digitales.
El acuerdo dinamiza el comercio sinalagmΓ‘tico, partiendo del Tratado de Independiente Comercio entre la RepΓΊblica Dominicana, CentroamΓ©rica y los Estados Unidos (CAFTA-DR), que entrΓ³ en vigor en 2006.
Ahora, crucialmente, El Salvador promete avisar barreras al comercio y servicios digitales. TodavΓa asegura que no va a fijar impuestos discriminatorios a servicios digitales. Los dos paΓses respaldarΓ‘n una moratoria mundial sobre aranceles en transmisiones electrΓ³nicas.
Este estilo, aunque no nombra explΓcitamente bitcoin o las criptomonedas, crea un entorno permisivo. Facilita el futuro de transacciones y servicios digitales en el que BTC podrΓa intervenir. Sin bloqueo, el acuerdo evita menciones directas a la moneda creada por Satoshi Nakamoto u otros activo digitales.
EE. UU. eliminarΓ‘ aranceles recΓprocos a ciertas exportaciones salvadoreΓ±as calificadas. Esto incluye textiles y prendas de vestir. Por otro costado, se reconoce el impacto positivo del acuerdo en la seguridad domΓ©stico, ya que EE. UU. considerarΓ‘ el acuerdo en medidas comerciales futuras. La expectativa es finalizar todos los aspectos que incluye el documento rΓ‘pidamente en las prΓ³ximas semanas.
ΒΏCΓ³mo este acuerdo abre camino a bitcoin?
Este acuerdo, aunque no menciona directamente a bitcoin, podrΓa significar varios puntos secreto por su enfoque en el comercio y los servicios digitales.
Por ejemplo, al comprometerse El Salvador a avisar barreras y no imponer impuestos discriminatorios a los servicios digitales, y al apoyar los dos paΓses una moratoria sobre aranceles en transmisiones electrΓ³nicas, se crea un entorno mΓ‘s benΓ©volo. Esto para cualquier negocio que opere en el espacio digital. Esto incluye lΓ³gicamente a las empresas de bitcoin y criptomonedas, ya que se consideran servicios digitales.
Si este entorno de comercio digital demuestra ser exitoso y sienta las bases para un flujo mΓ‘s exento de servicios digitales, podrΓa establecer un precedente. Esto servirΓa para que futuros acuerdos comerciales, tanto con El Salvador como con otros paΓses, aborden de forma mΓ‘s explΓcita los activos digitales.
Aunque no hay reglas especΓficas sobre bitcoin, la cooperaciΓ³n en Β«buenas prΓ‘cticas regulatoriasΒ» en el Γ‘mbito digital podrΓa aceptar a una viejo armonizaciΓ³n entre EE. UU. y El Salvador en cΓ³mo tratan los servicios digitales, lo cual, a la larga, beneficiarΓa a la industria de los activos digitales al estrechar la complejidad de intervenir internacionalmente.
Adicionalmente, el hecho de que EE. UU. firme un acuerdo tan amplio con El Salvador, sin imponer restricciones sobre su polΓtica de bitcoin, puede interpretarse como una seΓ±al de viejo confianza por parte de Washington en torno a el paΓs centroamericano. Esto a pesar de las crΓticas previas de organismos como el Fondo Monetario Internacional.
La firma de este acuerdo coincide con la celebraciΓ³n del evento Β«Bitcoin HistΓ³ricoΒ» en El Salvador. La cumbre, organizada por la Oficina DomΓ©stico de Bitcoin, reΓΊne a lΓderes del ecosistema en tierra salvadoreΓ±a, tal como lo informΓ³ CriptoNoticias.



