Casi comienza la temporada de impuestos en España, tiempo en el que los contribuyentes deben resolver su actividad con bitcoin (BTC) y criptomonedas frente a el gobierno gachupin de forma clara y verídica.
Este año, Hacienda conocerá todos los movimientos de criptomonedas de los residentes del país. Como se ha reportado en CriptoNoticias, hay una serie de impuestos que los contribuyentes españoles que operen con criptomonedas deben resolver.
La negocio y posesión de bitcoin no hay que declararla en España, con algunas excepciones. Sin confiscación, no resolver bitcoin frente a Hacienda acarrea sanciones monetarias. Frente a esta situación, surge la pregunta: ¿Qué deben hacer los españoles que quieran entregar sus BTC no declarados?
De acuerdo con el economista tributario José Antonio Impetuoso, entregar bitcoin y criptoactivos sin declararlos puede tener consecuencias. Como lo ve, si el valía de una cesión de BTC se lleva a una cuenta bancaria en España y no se declara, “es muy sencillo que el contribuyente se encuentre con un requerimiento por parte de la Oficina tributaria”.
Esto se debe a que la Agencia Tributaria Española (AEAT) exige a las entidades bancarias que informen cuándo un cliente envía y/o recibe hacienda de un exchange“y esta es la fuente de la que nacen los avisos sobre criptomonedas en Renta”, explicó Impetuoso.
Aquellos que quieran entregar sus bitcoin y criptomonedas no declaradas, deben conocer que tienen que someterse a realizar declaraciones complementarias del Impuesto al Patrimonio. Este extremo, que se paga si el patrimonio intrascendente claro es de 700.000 euros en genérico.
Hay que avalar
Sin confiscación, esta complementariedad no es gratuita. Por no deber claro a tiempo, el contribuyente tendrá que someterse al suscripción de multas o recargos. Explica Impetuoso que, al tratarse de declaraciones realizadas de forma voluntaria, estas serán objeto de un recargo del 1%, más otro 1% por cada mes completo pasado desde que acabó el período de información voluntaria, que normalmente es el 30 de junio del año subsiguiente al claro.
En el caso del Maniquí 721, todavía se puede resolver voluntariamente con una puro de 10 euros por cada nota o conjunto de datos referidos a una misma persona o entidad que se tuviera que informar, con una puro mínima de 150 euros y máxima de 10.000 euros, recordó el economista.
Es importante señalar que, según José Antonio Impetuoso, la mera negocio y posesión de BTC no hay que declararla“excepto que nos encontremos con un supuesto en el que haya que resolver en el Impuesto sobre Patrimonio o en el Maniquí 721 por tener las criptomonedas en exchanges en el extranjero”. Esto produce un hecho imponible, que es la transmisiónya sea onerosa o a cambio de hacienda, capital o derechos, o lucrativa o sin contraprestación, indicó.
Frente a esta situación, algunas personas podrían optar por alternativas para entregar sus bitcoin sin declararlos, realizando intercambios peer to peer (P2P) a través de plataformas como lnp2pbot o Mostro, por mencionar algunas. Pero esto es viable solo para importes muy pequeños.
“Y siempre que ese hacienda no aflore, es proponer, que no aparezca como un ingreso proveniente de bitcoin”, aclara Impetuoso, quien advierte, sin confiscación, que esta metodología “no es útil para importes de más de 1.000 euros”, oportuno a la aplicación de la regla de delirio del Género de Influencia Financiera Internacional.
La transparencia y la información adecuada de los activos en criptomonedas son esenciales para evitar sanciones en España. La temporada de impuestos se acerca, y con ella, la condición de que todos los contribuyentes se aseguren de cumplir con la norma actual para evitar problemas con Hacienda.
