Más de 2.6 millones de ethers (ETH), valuados en unos 11.500 millones de dólares al precio presente, esperan en la nalgas de salida del staking de Ethereum, según datos actualizados al 11 de septiembre de 2025. Esto representa un movimiento de salida inédito para el staking de esta red.
Esta acumulación de solicitudes de retiro refleja un recrudecimiento en el comportamiento de los validadores en la red Ethereum, donde el tiempo en nalgas de paciencia para descuidar el staking puede alcanzar los 45 días y 18 horas.
El engendro se produce en un contexto de mercado alcista para el ether, que cotiza por encima de los 4.500 dólares, y podría estar impulsado por la intención de materializar ganancias acumuladas durante meses de sitio de fondos.
La nalgas de salida ha crecido de guisa sostenida en las últimas semanas, pasando de cifras cercanas a los 600.000 ETH a principios de agosto a los niveles actuales, que representan un cuerpo significativo de haber inmovilizado.
En contraste, la nalgas de entrada, con 760 mil ETH pendientes de activación, muestra un tiempo de paciencia más moderado de 13 días y 5 horas.
Esta disparidad indica que, aunque persiste el interés por unirse al staking —el mecanismo mediante el cual los usuarios bloquean ETH para validar transacciones y reforzar la red a cambio de recompensas—, el impulso dominante ahora, de espacioso, es el de retiro.
Al momento de la redacción, Ethereum mantiene una colchoneta sólida de 1.057.472 validadores activosque representan el 29,18% de la propuesta total de ETH en circulación, con un rendimiento anualizado (APR) del 2,85%.
El staking en Ethereum, implementado tras la transición a prueba de estaca en septiembre de 2022, requiere que cada validador bloquee al menos 32 ETH para trabajar un nodo que proponga y valide bloques en la dependencia. Este sistema reemplazó al prueba de trabajo y ha atraído a más de un millón de participantes en su pico, pero las colas de entrada y salida funcionan como un freno regulador.
Diseñadas para evitar fluctuaciones bruscas en el número de validadores —lo que podría comprometer la estabilidad, la seguridad o el rendimiento de la red—, estas colas limitan la tasa de rotación (tundir) de los validadores.
Es de esperarse que los más de 2 millones de validadores en la nalgas de salida no completen el proceso de retiro de sus ethers —algunos podrían retractarse—. Siempre que los validadores acumulan rentabilidad, suelen retirar sus posiciones para capturar el valía de sus ethers en fíatun patrón que se repite ahora en un entorno de apreciación del ether.
Este comportamiento obedece a factores como la toma de ganancias tras periodos prolongados de sitio, combinados con el producir acumulado de recompensas.
Aunque el APR presente del 2,85% es modesto comparado con el de, por ejemplo, 2023, el aumento del precio del ETH ha elevado el valía total, incentivando panorama para rebalancear portafolios o explorar alternativas como el restaking en protocolos derivados.
A pesar de la presión de panorama, la red Ethereum no enfrenta riesgos inmediatos. Con más de un millón de validadores en operación, el principio intrascendente para un consenso robusto se mantiene incólume, y el tundir controlado asegura una transición progresivo.
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